LA PELI ROJA

LA PELIRROJA: Un debate que va más allá del color de cabello.

Hoy, en el grupo Médicos Generales en Colombia de Facebook, se desató un vendaval de más de 200 comentarios en menos de 30 minutos. Todo por una publicación inesperada sobre una doctora con el cabello tinturado de rojo.  

Alguien comentó: "¿Es un pájaro loco o un médico?"—esa fue la frase que encendió la discusión.  

Más allá del tono de la publicación, el debate expuso una realidad preocupante: ¿también nos van a juzgar por cómo nos vestimos, si llegamos en carro o en bicicleta, por cómo dormimos, caminamos o incluso si tomamos un momento para comer o sonreír?  

No basta con que en Colombia las EPS—aseguradoras que deberían ser promotoras de salud—restrinjan en muchas ocasiones la autonomía médica. No basta con que exista un internado no remunerado y un Servicio Social Obligatorio que refuerza condiciones laborales precarias. No basta con que los salarios sean indignos y las condiciones de trabajo, lamentables...

Ya son muchos los médicos que han sufrido accidentes por microsueño, obligados a manejar entre turnos extenuantes.  
Ya son muchos los médicos agredidos por pacientes, víctimas de un sistema que privilegia el aseguramiento sobre la atención.  
Ya son muchos los médicos insultados, acosados, despedidos por hacer su trabajo y buscar lo mejor para sus pacientes.  

Y, para colmo, ni siquiera pueden protestar legalmente por mejores condiciones, como lo reafirmó la Corte Suprema en la Sentencia SL-11680 (64052).  

Así estamos: maltratados, obligados, mal pagados, agredidos y vilipendiados. Y ahora, al parecer, también juzgados por el color del cabello. La publicación de Andrea Pérez Forero no solo expuso a la médica sin su consentimiento, sino que dejó en evidencia el absurdo de estas críticas.  

Pues NO. Aunque legalmente no podamos marchar, aunque los medios ignoren nuestra voz, las redes sociales siguen siendo nuestro espacio.  

Por eso, este mayo y junio:  
#MédicosPeliRojos o #MédicoPelirrojos (por ortografía no nos vamos a pelear).  

Si quieren unirse, suban sus fotos con el hashtag y compartan su mensaje.  

Y si eres de otra profesión y quieres apoyar, bienvenido. El color de tu cabello no define tu capacidad ni tu dignidad profesional.

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